Poesía subterránea nacida en el Teniente" Rancagua Chile"

Después del hermoso sueño viene el preguntarse, cuándo puede volver... mañana, pasado tal vez, este otro mes, no sé, solo sé que ese día es ayer... ayer fue un suspiro un beso... pero es ayer, ayer te volveré a ver. Poeta Minero Derechos Reservados

      Un pajarito me dijo si tú quieres volar, tienes que abrir las alas para poder despegar… y correr y correr… correr sin parar, moviendo las alitas para poder volar… para poder volar. Poeta Minero Derechos Reservados

                                                                              Compartimos  tantas ideas, que nos olvidamos de él, sí, de él, mi amigo, poniendo solo en la mente, una lucha, un destino, una bandera ,un símbolo, olvidándote amigo, No te he dicho lo bien que me he sentido contigo, a pesar de no estar de acuerdo y  de las  veces discutimos, pero a la hora de la adversidad estrechamos caminos, pero nos olvidamos de los sentimientos, quizás los perdimos pero puta que es difícil, vivir en estos tiempos y  decir los sentimientos, quizás los perdimos y no nos decimos nada...                                              Pero somos amigos; cuántos no hacen lo mismo, si estrecharse la mano es tan sencillo, preguntarte qué te pasa amigo, en que te puedo ayudar, a pesar que en muchas cosas no coincidimos…  Vivimos bajo un mismo sol y estamos vivos, no esperemos la muerte, para comprender eso, que somos humanos y ad

       Dormido Con la cabeza agachada, los oídos tapados, no sabia lo que pasaba a mi lado, esas caras de jóvenes envejecidos, sin saber de su pobreza, menos de su destino; no escuchaba sus peleas, ni sus gritos de impotencia, que parecían alaridos, no escuchaba sus quejas, cuando algo había subido, tampoco sentía el rechinar de sus tablas y zapatos, cuando había llovido, pensar que no oía ni miraba, y bajo mis narices todo esto estaba, ¿cómo no haber visto… a esa vecina que no tenía que comer,? que la niña se vendía, ya que otra cosa no podía hacer,   ¿cómo no saber que habían desaparecidos,? y que encadenados seguíamos por un mismo camino, sin escuchar los gritos de algún vecino pidiendo un mejor destino, ni oír el fusil del enemigo, menos ver un estirar de manos abiertas mostrando otro camino; ¿que pasaba,? estaba dormido, catorce años dormido y un día descubro, como es este mundo mío, ahora me revelo, oigo y digo,

Crecieron ¿ dónde están mis  niños con los que jugaba a la guerra, o a los carros con ellos metidos entremedio de mis piernas,?, ¿ dónde están los títeres con los que armábamos y desarmábamos mundos imaginarios? ya han crecido sus pequeñas manos, los abrazos y arrumacos son para niños chicos, y pienso en que espacio del tiempo crecieron… ya deje de ser el héroe de sus jornadas, soy ahora el viejo anticuado… el ocaso de un héroe que los acompaño en muchas de sus jornadas, en una tarea, en una travesura compartida, en un descubrir el mundo caminando a mi lado, ahora tienen su propio universo… su mundo particular… donde ya no soy el pirata ni el capitán, son ellos los héroes de cada jornada y quieren recorrer el mundo solos… más allá de donde yo los llevaba. Crecieron, no hay dudas son distintos ahora las mañanas,

Cinco de Octubre quizás ese cinco de octubre cuando comenzamos la jornada, no tenias mucha confianza, pero igual le echaste para delante, había que pelear la democracia, quizás el sol y el hambre te perturbaban, pero en la mesa el destino de la patria se jugaba, una incertidumbre nos embargaba, como será el día de mañana, será verdad el caos que nos anunciaban, será verdad que llegara la alegría anunciada; pero atenta la vista por cada voto que se firmaba, uno, dos, tres, las cartas estaban echadas, el frió de la noche te anunciaba lo poco que quedaba; uno a favor otro en contra, que incertidumbre… como será mañana, seguir el conteo con toda calma, con esa calma que tuvieron los que a todo sol esperaron, para decidir el futuro, el mañana; aquí hemos ganado, pero no ha terminado la jornada, hay que llenar tantos papeles, la emoción nos embarga, será en todas las mesas este florecer de esperanzas; irse con un poco de alegría para la casa, el trabajo estaba hecho