El abuelito Fernando " De mi libro Poeta Minero 50 años
Triste
soledad
llama a su hija
¡Verónica, ven por favor!
no me dejen solo, decía,
¡qué pasa que nadie me contesta…!
¡Qué pasa…!
Y su mente se vuelve a apagar…
Divaga en su enfermedad,
quiere volver a tener el control,
Pero se siente solo, apagado,
solitario,
su mente va y viene,
quiere conversar;
unos tomates con cebolla,
es el único manjar
que quiere probar…
¡Verónica…!
Grita una y otra vez,
¡Verónica….!
Que pasa que nadie me contesta,
y su mente cansada se vuelve a
apagar,
quedando su boca reseca de tanto
soñar…
tomate con cebolla..
porque no me traen para almorzar…
¡Verónica…!
Porque no me contestas…
Y mi esposa donde esta…
Solo en su cama del hospital,
solo el silencio lo viene a
acompañar.
Poeta minero
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